La caja de texturas es un juego didáctico que ejercita el sentido del tacto para que niñas y niños desarrollen habilidades que les permitan distinguir diferentes texturas, ya sean lisas, suaves, rugosas o ásperas. La actividad de reconocimiento táctil propicia la acentuación de las relaciones viso-motoras y desarrolla la memoria a corto plazo.
Dominó orientado a fomentar el respeto y diversidad, apreciando la riqueza de la multiculturalidad. Contiene fotos reales de caras de niñas y niños de diferentes razas.
Recurso didáctico orientado a favorecer y potenciar el valor de la inclusión desde la infancia, favoreciendo la oportunidad de desarrollo y aprendizaje y también un sentido de pertenencia grupal. Piezas de madera con ilustraciones en ambas caras, de niños y niñas con necesidades especiales.